Powered By Blogger

miércoles, 30 de mayo de 2012

La Fiana

Mi rincón con encanto es un sitio hechizante porque para mí, es muy pintoresco. Es un bar en el barrio del Born. El bar se llama Fiana. He decidido elegir este lugar porque, como he dicho antes, es muy diferente de otros bares, y también es posible olvidar que estás en Barcelona o en una gran ciudad que me gusta mucho, porque algunas veces necesito calmarme. Es acogedor y al mismo tiempo tremendamente tranquilo. Me gusta ir a este lugar cuando quiero relajarme y evadirme. También es genial para tapear o para tomar una copa con tus amigos en entornos muy espectaculares.

El ambiente en el bar es muy oscuro, pero no pasa nada porque hay muchas velas que hacen que no sea sombrío, sino mágico, y si tienes un día muy estresado, entonces es perfecto ir para soltar tus frustraciones. También alberga lámparas pintorescas en colores no llamativos, que, colocadas de una manera que parece aleatoria, hacen de éste, un lugar muy hechizante. Hablando de la tranquilidad que transmite Fiana, el bar tiene almohadas muy grandes, como un sofá hecho de almohadas donde puedes estar cómodo con tu mojito o con nachos, como tú quieras. Te hace pensar que estas como en tu propio salón de casa y creo que es el lugar perfecto para una cita debido su ambiente acogedor y tranquilo.

Sin la menor duda, no puedes encontrar un lugar en Barcelona como éste, con su magia, y donde en pocos segundos estás totalmente relajado. Para mí, cuando voy a entrar a Fiana es como entrar en un mundo diferente, como en un cuento parecido a Narnia , cuando los niños entran en el armario y vienen a un mundo mágico. También las comidas y copas son maravillosas , y cuando ya acabas cansado de tanta discoteca, cosa que llega tarde o temprano… venir a Fiana es ideal para tomar copas con tus amigos , o con tu novio/novia porque allí no hay ruido ni demasiada gente pero hay música tranquila y un ambiente hechizante…

Escrito por Sidsel Olesen

Bares y Restaurantes en Barcelona


En Barcelona hay muchísimos bares donde puedes gozar de cañas, chupitos y sangría. Por ejemplo a mí me gusta mucho ir de copas a un bar que se llama ‘Hot bar’. Hot bar puede ofrecer muchas cosas que me encantan. Unas de las cosas fantásticas es que también está un bar de chupitos. Aquí puedes disfrutar de chupitos que no solamente son chupitos de vodka, tequila o whisky. Los chupitos son combinaciones de todo tipo y hay chupitos fuertes, dulces e inolvidables. También los chupitos tienen nombres de famosos como Shakira, Britney etc. Es decir que son chupitos diferentes en comparación con los chupitos de otros bares en Barcelona.

Otra cosa que puedes hacer en Hot Bar es que puedes jugar al Billar americano que es un juego muy social porque puedes hacer equipos de más de una persona y por eso mucha gente puede disfrutar al mismo tiempo. La tercera cosa buena en Hot Bar es que está muy cerca de la discoteca que se llama Sutton. Sutton es el lugar donde todo el mundo sale el jueves y el sábado, y es una discoteca muy cara – por eso has de beber chupitos, cervezas o copas en Hot Bar, para estar borracho por un dinero razonable antes de ir a Sutton.

Otro bar que es muy diferente pero al mismo tiempo fabuloso es Ryans Pub. Es un ambiente muy tranquilo y muy relajado. Lo genial de Ryans Pub es que puedes comprar cervezas por sólo 2 euros y cuando eres una estudiante de Erasmus por 1 euro. También puedes desmadrarte muy fácilmente porque las cervezas desaparecen antes de que puedas contar hasta diez.

Cambiando de tema hay un montón de restaurantes en Barcelona donde puedes tapear o comer comidas más grandes. Hablando de tapas, a mí me gusta mucho el lugar que se llama ‘Tapa Tapa’. Aquí es posible ver lo que el restaurante ofrece porque tiene fotos de todas las tapas. La calidad es muy buena y los precios son aceptables.

Otro restaurante que es absolutamente ingenioso es ‘Santa Caterina’ porque allí puedes escoger muchos tipos de comidas, por ejemplo sushi, comidas orientales, comidas mediterráneas y hay muchísimas otras posibilidades para elegir.
Finalmente se puede decir que en Barcelona hay bares y restaurantes diferentes de todos los tipos.

Escrito por Sidsel Olesen

domingo, 27 de mayo de 2012

TEXTO 4: MI RINCÓN CON ENCANTO

Tengo un amigo que voy a visitar de vez en cuando a Torre Baró . Es un sitio un poco alejado del centro, en las alturas de la ciudad condal. El problema para volver es que sólo hay un bus que pasa cada 40 minutos. Un día perdí el bus y tuve que bajar andando para ahorrar tiempo. Y es así, por casualidad, que descubrí un sitio hechizante.
Se trata de una larga escalera pintoresca que permite bajar de Torre Baró hacia la ciudad. Cuando estas arriba tienes una vista tremendamente espectacular sobre toda la ciudad de Barcelona. Me encanta porque no hay turistas, de hecho no hay casi nadie, sólo gente del barrio que pasean con sus perros. Es un cobijo exquisitamente tranquilo, flanqueado por flores y plantas de todo tipo. Me gusta mucho pasarme por allí, sobre todo en verano, por la mañana, cuando el sol acaba de amanecer. Es alucinante. A medida que vas avanzando por este sitio embriagador, todos tus sentidos se despiertan. Puedes escuchar el silencio y contemplar la vista increíblemente maravillosa mientras que el sol y la brisa acarician tu piel. Es un rincón mágico muy relajante que te permite, durante unos minutos, escapar del estrés de la vida cotidiana. De hecho he decidido elegir este lugar embrujador porque es un escondite que te despista totalmente. Cuando te encuentras allí estas rodeado de naturaleza y, sin embargo, estas a tan sólo 5 minutos de la ciudad.
Barcelona es una gran ciudad repleta de rincones con encanto así que tu también, visita, pasea, busca un lugar especial para ti. Puede que lo encuentres en la playa, en uno de los barrios pintorescos que alberga la ciudad o en las afueras. Comprobarás que es importante tener un escondite donde puedas pensar, relajarte o aislarte cuando lo necesites. Será un sitio en Barcelona donde siempre podrás volver después de tu estancia como estudiante Erasmus.
 CHOQUE DE CULTURAS

Cuando nosotros los franceses pensamos en los españoles, nos viene a la cabeza imágenes preconcebidas como las de hombres bajitos que hablan fuerte, un poco vagos y brutos a quienes les gusta ir a ver corridas de toros y que comen paella bebiendo sangría. ¿Pero en que ámbitos surge realmente el choque de cultura para un francés que llega a Barcelona? A continuación, te voy a dar 10 consejos para entender mejor a los españoles, intentar evitar los malentendidos y aprovechar tu estancia aquí en Barcelona.
¡DEJA EL “USTED” Y TUTEA! Si en Francia es muy común el hecho de hablarles de “Usted” a los desconocidos, los profesores, etc... aquí en España es muy usual de tutear a casi toda la gente que nos encontramos. Puede que te cueste un poquito al principio pero verás que cogerás muy rápido la costumbre.
¡RETRASA TU RELOJ DE 2 HORAS! Una de las cosas que más te costará acostumbrarte a tu llegada en España es el ritmo de vida español. Si es verdad que España es un país vecino y que no presenta el problema de desajuste horario, aquí, sin embargo, los horarios de las tiendas, de los restaurantes, etc... son muy diferentes de los que podemos encontrar en Francia. Ni se te ocurra irte de compras entre las 14' y las 17' que lo único que te encontrarás serán persianas bajadas.
¡DESCANSA! Y ¿qué hacen los españoles entre la 14' y las 17'? Pues buscan una horita para dedicarla a … la siesta! Dicen que es el deporte nacional. Aprovecha tu estancia aquí para iniciarte! Verás que no tiene nada de malo, al contrario!
¡TEN CUIDADO! Aun con todo, el metro barcelonés tiene muy mala reputación. Es cierto que los carteristas están muy presentes pero no más que en París, por ejemplo. No se tiene que ir con miedo en el metro, sin embargo es imprescindible estar alerto y cuidar de sus cosas.
¡QUE NO TE TOMEN EL PELO! Si es cierto que los carteristas vigilan especialmente a los “guiris”, no son los únicos... Si eres del tipo que eleva el cartel de “guiri” en la frente, te darás cuenta que algunos restaurantes tienen un trato especial con los extranjeros que consiste en cobrarles a precios muy elevados. Así que ten cuidado en el momento de pagar y fijate bien en la cuenta.
¡OBSERVA, APRENDE Y ADÁPTATE! Estas 3 palabras son muy importantes cuando llegas en un país cuya cultura es diferente de la tuya. Si no quieres que te achaquen de “guiri”, debes seguir algunas reglas como, por ejemplo, nunca beber sangría, nunca cenar paella (reservada para los jueves y los domingos en familia), no ponerte rojo como un tomate tomando el sol, nunca ir por el centro en chanclas, etc...
¡TOMATELO CON CALMA! En cualquier caso, a los españoles no les gusta pedir las cosas “por favor” y no les molesta empujarte sin disculparse cuando andan por las calles, pero no te lo tomes a mal. No es que sean brutos, simplemente que tienen códigos diferentes de los nuestros. Mientras que este comportamiento te parece a ti una falta de respeto, a los españoles los “por favor” que pronunciamos cada dos por tres les resultan exagerados y pesados.
¡NO TE CORTES! En otros casos ocurre lo contrario. Por ejemplo para dar las gracias al momento de recibir un regalo. Si a nosotros los franceses generalmente nos basta con un “gracias” seguido de 2 besos, a los españoles esta reacción les puede resultar sosa y pueden interpretar que el regalo no ha gustado. Otra costumbre que tienen los españoles es la de hablar fuerte. Para ellos hablar bajito puede ser una muestra de timidez o de inseguridad. Así que para evitar cualquier malentendido no te cortes, habla alto y claro y se generoso con las “gracias”.
¡TÓMATE UN CAFÉ! Uno de los elementos culturales que me resultó más simpático aquí en España es la costumbre de encontrarse en los bares. La ciudad está llena de pequeños bares donde la gente del barrio se encuentra cada día para charlar, donde la gente mayor queda por la mañana para desayunar, etc...
¡COMPARTE! Aquí en España el hecho de compartir a la hora de comer es una cosa muy común. Si en Francia comemos generalmente un primero y un segundo cada uno cuando vamos al restaurante, los españoles tienen la costumbre de compartir varios primeros antes de escoger un segundo cada uno. Esta costumbre tiene seguramente su origen en el tapeo, que es un elemento emblemático de la cultura española. Así que acostúmbrate a compartir ¡que es mucho más simpático!
Aprovecha estos 10 consejos para intentar evitar los malentendidos que podrían surgir y no te olvides que cuando llegas a un país extranjero, lo mejor es observar a la gente e intentar adaptarse a esta nueva cultura. Veras que disfrutarás mucho tu estancia y que será una experiencia muy enriquecedora.

Mi rincón con encanto- Casa Batlló


Cuando me siento triste y estoy sola, me gusta visitar el edificio exquisito de Gaudí, Casa Batlló en el Paseo de Gracia. Casa Batlló es un edificio restaurado por Gaudí en 1904. La impresionante fachada es un icono de referencia en Barcelona al igual que todos los edificios de Gaudí, es notable en el diseño y no hay líneas rectas en lo más mínimo. Cada parte del exterior del edificio y el interior están formados por tejas curvas y paredes blancas.  El techo reluciente representa la espalda del dragón que Sant Jordí mató en la famosa historia, y la extraordinaria chimenea representa la lanza que usa Jordí para matarlo.
Hay un banco justo frente a la casa, y desde aquí, tengo el asiento perfecto para admirar la obra maestra. Me encanta ir allí por la noche, cuando no hay nadie,  justo antes de la puesta del sol porque el cielo está lleno de colores llamativos y estrellas brillantes, similares al cielo intenso de un cuadro de Monet. Los colores del edificio se destacan por la iluminación del cielo y es impresionantemente pintoresco. La luz del cielo es extraordinariamente difusa, con sombras suaves. Para mí, es casi de ensueño y es posible escapar mentalmente del resto del mundo. Normalmente, es muy tranquilo, con las condiciones de paz, ideal para contemplar mis pensamientos.  Me relajo completamente. Aunque la casa está situada en una calle principal, en este momento, la mayoría de los turistas han desaparecido y por lo tanto estoy sólo yo y la vista espectacular. Simplemente pasar el tiempo aquí puede cambiar mi humor de negativo a positivo. Por lo tanto, para mí, es un lugar especialmente mágico. Me siento muy afortunada de vivir en una ciudad espectacularmente impresionante y hermosa.

jueves, 24 de mayo de 2012

Mi Rincón con Encanto - Poblenou


El barrio de Poblenou es un lugar especial para mi, esta lleno de encantos. Estoy viviendo y estudiando en este barrio y cada vez que exploro sus calles encuentro nuevos sitios impresionantes. Poblenou tiene una gran mezcla  entro lo nuevo y lo viejo, con mucha historia del pasado industrial de Barcelona. Hoy, hay unos  edificos que se mantienen bien conservados y otros que parecen ruinosos y que ademas tienen grafitis en las paredes, y también hay algunos con diseño muy moderno. Yo creo que lo mágico de Poblenou esta en ese contraste. No obstante, hay mucha tranquilidad también, está la Rambla de Poblenou, flanqueada por arboles, restaurantes y tiendas hasta el mar y todo es increíblemente hechizante. 
La Historia de Poblenou
Poblenou no existiría como es hoy, si no fuera por el pasado industrial de Barcelona. Poblenou tenía la más grande concentracion de industria en Cataluña en el siglo XIX, sobre todo, del sector textil. Actualmente, muchos de estas fachadas industriales contienen estudios de diseño, centros de negocio o residencias al estilo de lofts. Estos cambios que ha experimentado en los últimos tiempos han sido posibles con los proyectos de urbanización del 22@ y el Fórum de la culturas. 
El lugar en sí
Hoy por las calles de Poblenou se pueden encontrar un monton de locales maravillosos. Hay un espiritu exquisitamente bohemio en Poblenou. Por la rambla de este sitio hay siempre mercados con cosas bellas para comprar,  una vez encontramos uno que era un mercado de intercambio de cosas que luchaba en contra del consumismo. He comido en muchisimos restaurantes con comida deliciosa en Poblenou. Uno de mis favoritos se llama ‘Aguaribay’, donde todo es organico y vegetariano. Después de comer se puede caminar por la playa y ver todos los ancianos tomando el sol y los niños jugando en las calles, uno se siente como si estuviera en un pueblecito y no en Barcelona. Para terminar, tienen que ver la vista desde la playa, que es tremendamente espectacular. Poblenou es una parte  de Barcelona completamente única, yo creo que tengo mucha suerte de vivir en este barrio.    

Mi rincón con encanto: Sant Jeroni (Montserrat)


Mi rincón con encanto: Sant Jeroni (Montserrat)


Sin la menor duda, la montaña de Montserrat sorprende a cualquiera que la visite por primera vez y es una fuente inagotable de rutas naturales por descubrir. Montserrat está situada a unos cincuenta kilómetros al noroeste de Barcelona. El mirador de Sant Jeroni es el más alto de Montserrat: 1236m. Me fascina este lugar porque es acogedor, con hechizo y único.


El nombre de “Montserrat” viene del catalán que significa: “montañas aserradas”. De hecho, la montaña tiene formas peculiares, de dedos y que evocan la obra de una sierra. Como un encaje de minerales, a menudo enterrado en niebla y suspendido entre la tierra y el cielo. Montserrat es “el sueño hecho montaña”, según palabras del poeta Josep Carner. Símbolo de culto religioso, es un lugar de peregrinación tanto para creyentes como para no creyentes.


Escondido en la sierra está el Monasterio de Montserrat, formado por dos partes bien diferenciadas. Por un lado, la basílica y las dependencias monacales, donde actualmente residen monjes benedictinos; por el otro, los edificios de servicios, que albergan apartamentos destinados al alojamiento de los peregrinos, los restaurantes, las tiendas. Durante las guerras napoleónicas, el monasterio fue quemado y saqueado en diversas ocasiones, y fue reconstruido años más tarde. Montserrat es un lugar mágico, por la leyenda de la aparición de una virgen negra vista por pastores en el año 880. Hay siempre muchísimos turistas, por eso prefiero caminar por la naturaleza que la flanquea.


Descubrí este lugar con mi mejor amiga, el septiembre pasado. Después de tantas horas caminando y sudando, nos sentíamos muy contentas y orgullosas de llegar al mirador de Sant Jeroni. La vista panorámica era increíblemente maravillosa y fue extraordinario compartir esta experiencia con ella. Nos quedamos sin palabras, en armonía con la naturaleza que nos rodeaba.

martes, 22 de mayo de 2012


Mi rincón con encanto

Para mi un rincón con encanto es un lugar tranquilo y al aire fresco. Aunque en mi piso también hay tranquilidad, a veces necesito escapar de la rutina. En aquellos momentos cojo mis dos perros y voy a un bosque grande que está situado en el pueblo donde vivo.

Este bosque es tan grande que cruza diferentes pueblos. Es decir, que puedes pasear horas si quieres. A mi me gusta más pasear que sentarme con un libro debajo de un arbol, por ejemplo. Para mi este bosque es un sitio idílico y silencioso. Lo único que se oye son los ruidos de la naturaleza, por ejemplo el viento en los árboles o los cantos de los pajaros y yo dentro de todo observando la naturaleza y por supuesto como disfrutan los perros de este paseo. Cuando me voy a pasear nunca me llevo el móvil conmigo y tampoco el reloj. Así que puedo disfrutar estos momentos sin ningúna molestia. Es un lugar con duende en que se siente la paz y que es impresionantemente bello. Pero es también un sitio variado, dependiendo de la estación del año. 

Lo que más me gusta son los primeros rayos de sol cuando el invierno se convierte en la primavera y cuando los árboles se visten de verde. El invierno, sin la menor duda, también tiene sus ventajas. Me encanta mucho pasear por la nieve porque si está nevando todo parece más limpio y más silencioso y a los perros les da mucho gusto jugar en la nieve. En el verano cuando hace mucho calor en la ciudad y ni tu ni los perros os quereis mover a causa de este calor, el bosque es el único lugar donde puedes pasear porque los árboles dan sombra a los caminos. 

Por fin, para mi este bosque es un lugar especial en que se puede relajar. Sólo si está lluviendo es un poco incomodo pasear por el bosque y después limpiar los perros pero también puede ser una experiencia.             

Rincón con Encanto


Mi rincón con encanto es un camping en Cataluña, cerca de Tarragona. ¿Por qué? Porque desde hace 15 años no deja de fascinarme. No parece como un camping, sino como un parque paradisíaco, lleno de naturaleza. Las calles están flanqueadas por palmeras y flores muy espectaculares. Además, tiene diferentes caras que debes explorar: tiene cara de primavera, verde y mágica; cara de verano, lleno de gente sonriendo como si fueran en un parque de atracciones, y una salida y puesta extraordinariamente pintoresco; tiene cara de noche, silencioso, misterioso, es un lugar con hechizo.

La primera vez que estuve en el camping en Semana Santa 1996, y cada año volvía con mi familia. El corazón del camping es la piscina, rodeada por césped y palmeras para tumbarse al sol. Desde ahí, las calles se extienden como venas por todo el parque. Aparte de la piscina, el camping alberga otros dos lugares extraordinarios: la playa y una torre. La torre es la última sorpresa que había para mí: situado en la cumbre, sobre todas las caravanas y árboles, tienes una vista espectacularmente maravillosa al mar, a Tarragona, a los pueblos, las montañas, todo. Y, como solo pocos tienen ganas de subir a la torre, normalmente estás solo y puedes disfrutar el momento. 
vista desde la torre

La playa es otra cosa: de 11 a 24 horas lleno de gente. Necesitas tiempo para encontrar el encanto de este lugar. Puede ser una bahía que encuentras andando por la costa o puede ser la playa por la noche, con un poco de música y una cerveza. De alguna manera u otra, cuando cierras los ojos te sientes en un lugar único, tanto embrujador como aventurero.
la playa, en el fondo el faro de Tarragona
 
Sin la menor duda, cada año me hechiza otra vez, y es mi rincón con encanto.

lunes, 21 de mayo de 2012

La plaza del Parque Güell


En mi opinión la plaza del Parque Güell es el lugar en Barcelona más mágico. La verdad es que todo el parque es espectacularmente bellísimo, con los exquisitos pabellones cerca de la entrada, la impresionante escalinata hacia la plaza y los varios caminos sinuosos rodeados de la naturaleza que tejen por estos jardines públicos. Pero no cabe duda de que es la plaza que es el verdadero corazón del parque.

El Parque Güell fue diseñado por el arquitecto Antoni Gaudí entre 1900 y 1914, y se abrió al público en 1926, y luego en 1984 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. La plaza fue construida de forma ovalada y se diseñó como lugar para la celebración de eventos culturales. Lo más notable es que el borde es también un banco que ondula como una serpiente y está recubierto por mosaicos increíblemente coloridos que son hechos de pequeñas piezas de cerámica.

Para mí la plaza es un rincón con mucho duende y me fascina como todo el mundo es atraído hacia el banco y no puede evitar sentarse y dedicar unos minutos a contemplar la vida. Además, me encanta oír el sonido de la arena debajo de los pies en el suelo mientras los visitantes pasean hacia el banco, cuyo diseño ondulante permite que se pueda optar por sentarse en una de las partes cóncavas de la curva que son más íntimas y privadas, o se pueda elegir unas de las convexas que son más sociables y públicas.

En fin, es fácil pasar la tarde sentado en este lugar extraordinariamente embrujador y escuchar la risas de los niños que juegan allí o tal vez a la guitarra de unos de los músicos callejeros que frecuentan el parque. Pero la razón de que la mayoría de la gente visita este mirador es para las vistas espectaculares de la ciudad hasta el mar y la sensación increíble de que se puede casi tocar la paz y tranquilidad.

Subiendo al Tibidabo....




Un día, descubrí un lugar con duende en las afueras de Barcelona. Estaba con dos amigas y nos habíamos planteado subir al Tibidabo caminando.
El Tibidabo es un parque de atracciones ubicado en una colina al lado de la ciudad condal. El parque cuenta con 25 atracciones diferentes y una bellísima iglesia.
Así, descubrí un rincón con encanto subiendo al parque de atracciones. De hecho, mis compañeras e yo pasamos por varios senderos para evitar el tráfico de la carretera principal y para disfrutar de la calma. Después de más o menos treinta minutos de marcha, llegamos a un sitio en el que se tocaba la paz. En efecto, el sitio albergaba un pequeño estanque lleno de agua cristalina y flanqueado por varios tipos de arbustos. Unos peces rojos y amarillos nadaban tranquilamente en el estanque. Además, la vista sobre Barcelona desde ahí es increíblemente preciosa. Me siento pequeñita al contemplar Barcelona desde este sitio con magia.
He decidido describir este lugar tan especial porque para mí, es un refugio en el que se escucha el silencio y otra cosa que me encanta es que está en plena naturaleza. Olvido el ruido y la agitación de la ciudad cuando estoy ahí. Pruebo un momento de calma y me siento mejor, preparada para afrontar los problemas cotidianos.
En mi opinión, es un lugar acogedor y extraordinariamente bello. Me siento en paz cuando estoy ahí y es lo que me encanta. Es un sitio paradisíaco que inspira el bienestar y estoy segura de que podría ser una fuente de inspiración para un artista.   


Bredene, Bélgica

 




Para mí, la ciudad de Bredene, situada en Flandes Occidental (Bélgica), es un lugar muy especial. Es donde solía, y sigo, pasando la mayor parte de mis vacaciones.

Sin la menor duda, Bredene no es uno de esos sitios con historia, pero me gusta porque forma parte de la tradición de mi familia. Como mis abuelos no tenían dinero para ir de vacaciones con sus cuatro hijas, solían pasar cada verano en las playas de Bredene. Cuando mi madre y sus hermanas, a su vez, tuvieron hijos, decidieron mantener la tradición y llevarnos, cada verano, a mis primos y a mí a la playa.

Las playas de Bredene son largas, de unos 4 kilómetros. Hay una playa nudista, que es la única que hay en Bélgica. Las playas tienen duende porque no tienen una barrera artifical. En su lugar, las dunas forman la separación natural entre la ciudad y la playa. Es algo hechizante. Pero lo que me resulta realmente embriagador es oler el típico aire de mar, mucho más puro que el de la ciudad, y escuchar las olas que mueren hasta el rompeolas. Suelo sentarme allí para escribir y contemplar ese espectáculo.

Cuando erámos pequeños, salíamos a dar un paseo por la calle principal de la ciudad, flanqueadas por pequeñas tiendas de ropa, recuerdos, ... El día siempre se acababa en el mismo lugar, un restaurante donde degustábamos los mejores helados.

Desgraciadamente, en los últimos años, la ciudad se ha vuelto cada vez más urbana. Están construyendo edificios de arquitectura moderna muy feos por todas partes y eso rompe el encanto único de la ciudad. Intentan copiar el estilismo que hay en ciudades más conocidas como Ostende, pero con un resultado horrible. Además, como nosotros (mi primos y yo) ya somos mayores y cada uno tiene su vida, cada vez es más difícil encontrar un día para reunirnos todos.